martes, 19 de febrero de 2008

Melchor, El rey, y se cayó


Cuenta la historia que hace muchos, muchos minutos una de las zonas mas superpobladas de la isla de Tenerife, fue visitada por el último Borbón. Rey, claro.La zona en concreto, no es de las mas turísticas de la isla, en donde el visiteo de los forasteros supone mas del 80% de la economía de la tierra isleña.Ya no es que sea la zona menos turística de la isla, es que de intentar serlo, supondría para la economía insular un grave quebranto dinerario. La verdad es que no intentarlo sigue siendo un acierto. Ya se han encargado los gobiernos de la isla a tratar de reservar, esconder, o obviar, la mencionada “zona”, de las preciosas fotos comerciales para el reclamo de visitantes. Zona dicho sea de paso habitada por seres humanoides, currantes unos, menos los otros. Pero la mayoría, procedentes de la inmigración, pero no de la que el lector cree y está de moda, sino de la que vino ya hace años de La Gomera.La Zona, o “la Sona”, como quieran llamarle, no es otra que lo que fue un destacado aposento primitivo de lo que fueron los guanches, seres mediocres y nobles que les daba miedo el mar, como a mi. Mediocres porque ganaron alguna batalla, pero nunca la guerra.En Taco, aquellos nobles seres vivían de la leche que les daban las cabras, de la carne de los mismos animales, y de frutos y hortalizas que la tan bendita tierra paria. Por eso, cuando miramos a una cabra agonizar, o apunto de ser sacrificada, nos recuerda la cara de algunos guanches que vemos representados en los libros de historia, o en la plaza de Candelaria.Yo nunca hubiera pensado que en el siglo XXI, una zona como esta hubiera estado visitada por un rey, Borbón él, y que lo hubiera hecho de buena gana. Pero lo hizo.Yo que habitualmente grito aquello de “viva la republica”, soy consciente también, que he de gritar a continuación, y lo hago siempre, “y abajo la monarquía”. Es como ir en contra de la misma cosa pero por dos caminos al mismo tiempo. Y eso mola. Ahora bien, El Señor Borbón, que según parece vino a estas islas a recordar, o conmemorar el viaje de su abuelo de hace cien años, (que ya me dirán ustedes, que clase de excusas pone la realeza últimamente, para darse una escapadita antes del puente de la Constitución junto a todo su sequito), por lo que se cuenta, visitaron la preciosa ciudad de San Cristóbal de La Laguna, urbe ésta, donde es habitual que las propiedades de la Iglesia Católica de vez en cuando, se quemen a llama viva, estén o no aseguradas, o estén o no los bomberos de huelga. Y venga, blanca o no, fumata que te crío. (Y digo yo, ¿y que ha sido de la huelga de los bomberos? No lo se. No he leído los periódicos en los últimos años. )Pero no cambiemos de tema, y sigamos para Bingo.Los políticos que de esto entienden un rato, bueno un rato no, una larga historia, que es un rato muy grande, pero nunca tanto como una eternidad, que ese plazo de tiempo sólo lo pueden utilizar los curas, y el Obispo, digo pues, que los políticos, por lo que se cuenta, como casi siempre quisieron sacar “tajada” del viaje del Sr. Borbón. Raro, si. “Nosotros”, como lo harían los guanches, noblemente nos preguntamos, ¿y para que?. ¿Para que quieren esa “tajada”? Hay que aclarar que en el termino “nosotros”, sólo incluimos a las almitas que pagamos nuestros impuestos a rajatabla, y nunca tan bien dicho: i-m-p-u-e-s-t-o-s, porque en otros países, se les llama “contribución”, (vease País Valenciano), votamos, y no les exigimos nada a los políticos. Ya ves, y ¿Para qué?. Ellos ya se lo exigen los unos a los otros, y van a seguir haciendo lo mejor de lo mejor como lo hacen siempre, como dice la historia. Generalmente. Vamos que somos los mediocres de la “tajada”. ¿se acuerdan porque lo de mediocres a los guanches?. Pues bueno eso.Decía que siguiéramos para Bingo, porque al Sr. Borbón de la Gran y Gloriosa ciudad de San Cristóbal de La Laguna lo llevaron a inaugurar, cerca de un Bingo, así como el que no quiere la cosa, una piscina municipal, y un entorno precioso que servirá para impartir cultura, a esos habitantes de la Zona Taquera, Barriada de la Noble Ciudad Lagunera. Al mismo tiempo los políticos, supongo que consensuado con los responsables de la casa real le dieron una vueltecita al Sr. Borbón en lo que ya es una realidad. El Tranvía, señores. El artilugio que va resolver todos los problemas de tránsito de una de las zonas mas mal pobladas de la isla de Tenerife. Y si no lo resuelve, pues habrán suspendido la asignatura. ¿Y qué?, dicen, volveremos en Septiembre y haremos un tren grande que suba por la calle Castillo, desde la Plaza de España, atraviese La Plaza Weiller, cruce el parque García Sanabria, expropien alguna de las mansiones de la Rambla, y una esquina del Hotel Mencey, y atravesando un túnel que agujere “Las mimosas” salga todo recto hacia el Puerto de la Cruz, pero antes con parada en San Cristóbal de La Laguna. Jo, eso sería un proyecto, y no el travia. Yo en un principio pensaba, “mira que la casa real acceder a llevar al Sr. Borbón a este paseo”. Vaya, es que mas cutre ya no puede ser el tema. Yo me imagino el trenecito que sale de la cafetería del “reloj” del parque Gracia Sanabria, y allí arriba, sentaditos el Sr. Borbón y todo su sequito. Pues eso, estimados lectores, aún lo hubiera entendido. Pero, cuando este señor se ve arriba del tranvía, y rodeado de todos los canchanchanes de la política local y localista y otras hierbas, y cabizbajo, piensa, ¿ esto que es?, Madre de Dios, ¿que están haciendo conmigo?. Y en eso una voz en off, interrumpe la melodía del tranvía y se oye: “Nada hombre, nada, sólo lo de siempre. Vender lo que no tienen, fotografiar lo que venderán dentro de poco a los de siempre, a los que los volveran a elegir para que vivan decentemente, ¿Qué mas?, pues negar lo que han dicho y decir lo que después negaran”. Si todo eso y mas. Y mañana cuando usted Sr. Borbón se vaya, a primera hora, o a segunda, quitaran las florecitas, los adornitos, tendrán que rectificar lo asfaltado a trompicones, y volverán a molestar a los ciudadanos que viven cerca, y que en estos últimos días no les han dejado dormir porque la UTE encargada hacía trabajar a sus obreros las 24 horas, las nocturnas y todo. Y eso que éstas son mas caras. Pero volveremos nuevamente a la “Zona” donde cuentan las malas lenguas, hay escondidos cables por conectar, regatas por cubrir, y badenes por corregir, y mucho mas por hacer. Pero tapadito. Pero El Sr. Borbón, o “Juanca” para los colegas, no es tan tonto como me lo parecía, y la realeza me lo perdone, pero me lo parecía.Resulta que en acabar el viajecito con el tranvía, todos estaban callados menos uno, como siempre, (a veces suele ser el embustero y el saltarín), y no sabían que conversación iniciar al Sr. Borbón, y va, y Richy, impasivo él, no se le ocurre otra cosa que preguntarle, ¿Qué le ha parecido Sr. Rey?. No se sabe si se refería al paseito en tranvía, a las cocheras del tranvía que también lo llevaron a inaugurar, frente al Bingo, como todo, o a la modernidad que daba el tranvía a la “Zona”. (Taco). Pero la cuestión es que Juanca enrollado, le contestó, - mirad, lo que tenéis que hacer es terminar la obra, y terminarla ya –Caramba, poco dijo, pero dijo mucho. Mas de lo que parece, Yo diría que lo dijo TODO. (Cachís con el Sr. Borbón), me hubiera gustado un “coño” de añadidura. Pero no, el hombre es muy cauto.Hombre eso no se hace Don Melchior, a la próxima que sea otro el de la pregunta hombre.!! Yo también pensaba, que como lo oyes hablar de esa forma, al rey digo, que parece que se le enrolla la lengua, y no pronuncia bien la “egue”, no se fijaba en las cosas, y campa a su “bola”. Pero no, el tío se fija y se fija mucho. Mas de lo que vosotros, los políticos locales lo hacéis , y debierais. Pero vuestros paisanos, los de la “Zona” también se van fijando, y esto es lo que no os gusta que os digan.Seamos serios señores, que la “Zona”, o sea Taco, no es de C.C. políticamente, que digo yo, que sus habitantes deben de ser un poco de izquierdas, y eso molesta, y por eso todo el embrollo. Venga, que esto parece, pero hay que trabajar para que no parezca, La Republica Dominicana, que es lo que algún político y empresario quisiera. Que si, que se viaja mucho a ese país bananero, y todo se contagia, sobre todo lo fácil. Y los habitantes de la “Zona”, o sea Taco ya miran y quieren entrar en Europa. Que se lo merecen. Porque pagan. Que no son tan tontos.A ver si el electorado toma nota de esto.Por mi parte, difícil tengo que se publique lo escrito en una noble prensa de la localidad. Pero quiero cumplir con mi deber y mi derecho de libre-expresión a los ojos y los oídos, de los que saben que pasó hace muchos y muchos minutos.

Descansad.

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